En el feriado de Año Nuevo, luego del almuerzo, en plena siesta fui interrumpido por mi esposa:
- Elmo, ¿puedes llevarlo a pasear para poder terminar de hacer las cosas?
- Claro ...
Me levanté de mala gana, si en ese momento alguien me hubiera dicho para ir al supermercado que se encuentra a 30 cuadras, a pie, para comprar una máscara del hombre araña, me hubiera parecido la idea más absurda; pero los hechos ocurrieron así:
Elmo: Vamos campeón (dirigiéndome a Elmito).
Elmito: Vamos ... (él nunca pregunta a dónde).
Elmo: ¿Qué vas a llevar?
Elmito: Mi carrito azul (uno de sus regalos de Navidad).
Y salimos. Mi idea era ir a un parque cercano donde pudiera jugar con su carrito a control remoto mientras yo lo observaría sentado en una banca, pero las ideas de Elmito, poseedor de una energía inagotable, eran otras.
Camino a un parque que queda a tres cuadras de la casa, nos desviamos por iniciativa de Elmito y llegamos a la avenida principal, caminamos varias cuadras, yo todavía con la idea de un parque, cuando habíamos caminado unas 10 cuadras puso el carrito al piso y empezó a hacerlo andar con el control remoto, desde ese momento nuestra caminata se transformó en una persecución al carrito, en cada esquina, trataba de doblar para no alejarnos más y poder regresar a pie.
Elmito no daba su brazo a torcer y seguíamos caminando por la avenida principal cuadra tras cuadra, ya me había hecho la idea de que no íbamos a regresar a pie cuando Elmito se detiene y me dice "Papá, vamos al supermercado", estábamos a 4 cuadras y fuimos caminando por la ruta que él eligió.
Entramos al supermercado, Elmito miró algunos juguetes, encontró la máscara del hombre araña, se probó y con la máscara puesta me dijo "Vamos a pagar".
Ya con la máscara fue más fácil convencerlo de regresar a casa, a pesar de que Elmito quería seguir caminando, el hambre también ayudó porque en el camino entró a un local de hamburguesas esperando encontrar una pizza (es su comida chatarra favorita) y al no encontrarla no quiso quedarse.
Obviamente, el regreso no lo hicimos a pie.
9 comentarios:
Te aplaudiría tu actitud pero nomás de pensar todo lo que caminaron me canso.
Igual te aplaudo
Jaja los niños, capaces de hacernos notar que nuestra paciencia y energía son más flexibles de lo que creíamos.
Feliz año Elmo! Saludotes
Linda historia. Feliz año Elmo!
bueno agradece a Elmito que te ayuda a mantenerte en forma!!
esa máscara del hombre araña si no me falla la memoria creo que está como 45 lucas.... cara te salió la gracia. Saludos.
Feliz año Elmo..
Tómalo por el lado amable, hiciste una buena caminata de treinta cuadras y Elmito, se quedó feliz con su máscara.
la MaLquEridA:
Si me lo decían antes de caminarlas las 30 cuadras, no la hacía.
Saludos y Feliz 2015.
Daría:
En cuanto a paciencia no tengo problemas, pero mis energías son limitadas en comparación con las de Elmito que viene con baterías nuevecitas.
Saludos Y Feliz Año 2015.
Daniela Muente:
Después de todo, me pareció simpático el asunto, por eso lo posteo.
Pero para la siguiente vez de primera le voy a preguntar a dónde vamos a ir.
Saludos y muchos éxitos en el 2015.
Gary Rivera:
Creo que ese es el lado positivo, me esperan muchas jornadas con la bicicleta, el carro eléctrico, etc.
Saludos.
Eduardo Rodriguez:
Lo que más me dolió es la rodilla izquierda, por eso deje el fútbol.
Saludos.
Cafeinómana:
Ahora cuando a mi esposa le digo que si se puede ir al supermercado a pie, ella no lo toma tan amablemente.
Saludos.
Hola Elmo. Buena historia.
Sin duda, te obliga a ponerte en forma para no perderle el paso. Elmito es inacabable, ja ja.
Un abrazo y un feliz 2015 para tí.
LUCHO
Luis Guadalupe:
Aunque no quiera caminar o correr, debo hacerlo, por eso hasta em compre unas zapatillas después de mucho tiempo.
Saludos.
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