viernes, 14 de diciembre de 2007

Entendiendo a la mujeres

Mi esposa con la que mantengo una sociedad de gananciales (léase sin separación de bienes) tiene una forma particular de pedirme la cámara digital de fotos adquirida dentro de la sociedad conyugal.

Cada vez que va a usar la cámara me pregunta la noche anterior "¿Elmo, puedes prestarme la cámara?", al principio (bruto como todo pitecantropus erectus permanentis) yo respondía "amor, la cámara es de los dos, no necesitas pedírmela", pero con el tiempo comprendí el verdadero significado de la pregunta:

"Negro, ¿puedes poner a cargar las pilas de la cámara, pasar las fotos a la computadora, ponerle nombre y no lo dejarlo como Nueva carpeta, poner la cámara en su estuche, poner un par extra de pilas y una memoria más?"

1 comentario:

Anónimo dijo...




Oopss!
pensabamos que nunca nadie se daria cuenta del msje escondido :P